No hay nada como una tarde de tranquilidad en el salón de tu casa disfrutando de una buena pelicula y un buen vino, pasemos a analizar la viabilidad de pasar un buen rato de cine ante la última propuesta de Darren Aronofsky, conocido tras sus éxitos Pi y Requiem por un Sueño, y la no tan buena La Fuente de la Vida. Esta vez es El Luchador (The Wrestler), la propuesta que nos lanza este director, un cambio radical ante los planteamientos anteriores. Cámara en mano, a veces se hace un poco pesado o repetitivo este recurso, nos presenta la dura vida de una estrella de la lucha libre americana y los entresijos de la mente de esta persona, sus vicisitudes con sus allegados y los problemas de afecto para con su "familia". Tiene escenas muy buenas, y otras un poco anodinas, pero en general es muy recomendable, además de para conocer un aspecto nunca tratado antes en el cine, (muy buen papel del señor Rourke) para conocer el nihilismo en el que se ha basado la sociedad actual, y la dejadez por parte de las personas respecto a los aspectos más importantes dentro de su vida, y sobre todo una vez más una crítica brutal a la sociedad americana en la que esperemos no se asienten esta serie de valores en nuestra prole, aunque por lo que parece ser, se está haciendo un poco tarde, y no por culpa de ellos, sino de sus progenitores. Más tarde pude ver por segunda vez, Pactar con el Diablo, la cual me pareció un poco insulsa cuando la vi por primera vez, pero como todo lo bueno, once años después, se pueden apreciar una serie de detalles dentro del film, que le aportan gran continuidad y dinamismo, así como escenas en las que quizás nosotros mismos nos hayamos visto inmersos en ocasiones, además de un papel extraordinario por parte de una Charlize Theron desconocida entonces. En definitiva, muy buena para un viernes por la noche.
Cambiando radicalmente, tanto de medio como de temática, tuve la oportunidad de poder disfrutar del nuevo LP de Macaco "Puerto Presente", una propuesta positivista y naturalista de este grupo mestizo, más suave en cuanto a su planteamiento musical, pero igual de demoledaora con su mensaje, y es que aunque haya cambiado del cine a la música sigo escuchando el mismo mensaje, el cual parece que nadie escucha.......¿me equivoco?
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